La cervezas se conocen popularmente como claras y oscuras, pero simplificarlas sólo en estas dos sería un crimen contra toda la industria cervecera, no sólo porque existen más de dos tipos de cerveza, sino porque hay una variedad de sabores y aromas que no dependen sólo de los colores. Por eso, con el propósito de desmentir esta creencia, decidimos hacer una breve explicación acerca del origen del color de la cerveza.
El ingrediente encargado de darle el color a la cerveza es la malta, en específico, el grado de tostado que tiene. También tiene que ver con una reacción química llamada Maillard, que también se conoce como oscurecimiento, y que se da una vez que la cebada malteada se hornea . Esta reacción es la culpable de que tengamos algunas de las maltas más oscuras, tales como la de chocolate, o la Special B.|
A través de este proceso se dan las melanoidinas coloreadas, que son las que eventualmente le darán el color a la cerveza.
Las melanoidinas también ayudan tanto a la formación, como a la retención de espuma, y así como a la producción de un compuesto aromático llamado pirazina.
Para determinar el color de una cerveza, los cerveceros utilizan una escala llamada SRM, que por sus siglas en inglés significa Medida Estándar de Referencia, y se mide calculando la cantidad de luz absorbida por la cerveza en un recipiente de vidrio de 12.77mm, con una longitud de onda de 430 nm, que a su vez se multiplica por 10.


En las gráficas se muestran algunos estilos de cerveza según la escala de color del SRM y de acuerdo al Beer Judge Certification Program (BJCP)
Si bien, el proceso es mucho más complejo y detallado, esto es básicamente lo que le da el color a la cerveza: la malta, una serie de reacciones químicas, y una escala de color. Así que ya sabes, ahora puedes presumir un conocimiento más acerca de la cerveza y decir orgullosamente: #SoyCervecero
Te va a caer El Chahuiztle, y nunca te había caído tan bien.